Es un proceso de tratamiento biológico aeróbico de residuos domésticos, en el que se degrada biológicamente la fracción orgánica de los residuos mediante microorganismos que se desarrollan naturalmente en ambientes con presencia de oxígeno.

Este tratamiento también es apto para la fracción resto de residuos indiferenciados «todo en uno», incluyendo los residuos voluminosos, es decir, la bolsa negra de residuos domésticos y los objetos grandes sin separación en origen de la fracción orgánica del RSU.

Después de la degradación de la materia orgánica, se obtiene un residuo higienizado y estéril, sin olores ni lixiviados, que ha reducido su humedad hasta solamente un 10-12% y su peso hasta un 25-45%. Posteriormente, se pueden separar las fracciones recuperables para su reciclaje correspondiente (metales, plástico, vidrio, etc.).

En nuestras plantas de Bio-estabilización, los residuos se procesan en un edificio cerrado con una ligera depresión para evitar la emisión de olores. Los residuos se mantienen en condiciones controladas de oxigenación, temperatura y humedad con ventilación forzada.

Después de la descarga de los camiones de recogida, los residuos se trituran para maximizar el contacto con el oxígeno y homogeneizar la masa de residuos. La oxidación de la fracción orgánica de los residuos transforma los residuos entrantes en una matriz estable desde el punto de vista biológico, sin lixiviados, sin olores desagradables, higienizada y relativamente homogénea. Todo el proceso se controla mediante un sistema informático que garantiza su éxito, priorizando el rendimiento y la eficiencia.